#549 Destino o Libre albedrío

¿Qué pesa más, el destino o la voluntad?

En el país de los sordos nació un poeta, y con él, la oportunidad de conocer un lenguaje desconocido por todos. A eso llamamos destino.
Pero el poeta no se encerró ni se sintió desgraciado. Inventó un lenguaje de signos, se hizo entender, y transmitió sus emociones a todos.
Y en aquel país, la gente llegó a saber de memoria sus versos, y se sintió más feliz.
A eso es que llamamos voluntad.
Al momento de lograr un objetivo ¿Qué pesa más,
el destino o la voluntad?

Existe el destino? Está escrito? Estamos predestinados?

Seguro que podría hablar mas y mejor de Coaching.
Sin embargo en mi práctica diaria escucho muchas veces a la gente referirse al destino como algo que no podemos evitar y en mi búsqueda de alternativas surgió para mi la idea del Libre Albedrío.

El libre Albedrío puede ser visto desde diferentes perspectivas, a mi me gustaría hacerlo desde el Coaching que lo que hace es buscar posibilidades que nos acerquen a nuestros objetivos.

Las personas fuertes crean sus acontecimientos;
las débiles sufren lo que les impone el destino.
Alfred Victor De Vigny

¿Para qué nos sirve pensar que estamos predestinados?
Considero que el único camino que nos abre es hacia la resignación y el resentimiento y esto no nos ayuda. Por eso  considero que este otro concepto me apoya mucho mas.
Dado que hay miradas filosóficas y religiosas del mismo tema sugiero no tenerlas en cuenta ya que las mismas podrían alejarnos del punto al que queremos llegar.

Querer es poder.
Tu éxito es tu esfuerzo,
y ese es realmente tu destino.

Yo interpreto que el Libre Albedrío es la capacidad que tenemos los seres humanos de elegir frente a las circunstancias que nos tocan vivir y tomar nuestras propias elecciones sin seguir lineamientos tradicionales o dejarnos influenciar por nadie.
Es como un acto que ejerzo por mi propia voluntad.
Y aunque pudiera ser que hubiera un destino yo siempre podría elegir por cual camino llegar a él.

Puede que el destino baraje las cartas
pero nosotros somos los que elegimos
como jugar con ellas.
William Shakespeare

Y como ves , querido lector esta interpretación nos abre a la posibilidad de hacer cosas diferentes para lograr lo que queremos desde una emocionalidad de ambición y aceptación a la vez.
Es real que no podemos elegir las circunstancias que nos toca vivir pero si podemos elegir la actitud que tomaremos frente a ellas y las emociones que vamos a transitar para enfrentarlas.

Con esta mirada desarticulamos frases como era mi destino, está escrito, es lo que me toca, Dios lo quiere así…

Y ahora que no podemos tener estas explicaciones qué te separa de tus sueños?

Siempre se ha creído que existe algo
que se llama destino,
pero siempre se ha creído también
que hay otra cosa que se llama libre albedrío.
Lo que califica al hombre entonces es
el equilibrio de esa contradicción.
Gilbert Keith Chesterton

Publicado en 2013.

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