#462 Reacciones Desmedidas

En los últimos minutos de la Copa Mundial de Futbol del año 2006 Zinedine Zidane fue expulsado de la cancha por haberle dado un cabezazo al defensor italiano Marco Materazzi.
¿Cómo pudo uno de los jugadores con mas experiencia del mundo cometer una falta tan evidente en el momento mas importante de su trayectoria profesional?
Quizás esto fue una sorpresa para los espectadores y hasta para el propio Zidane, pero no creo que lo haya sido para sus oponentes. Creo que esto fue lo que habían planeado, lo que esperaban y lo que provocaron.
«Este Zidane es un magnífico jugador y quizás no podamos ganarle en el campo» pudieron haber pensado. «Pero tal vez podamos hacer que lo expulsen. De hecho quizás podamos hacer que él mismo se haga expulsar. Todo lo que tenemos que hacer es pensar en algo que le haga perder el control y le haga reaccionar sin pensar».
Y eso fue lo que hicieron.

Extraído del Libro » Mas allá de la Culpa» de Yehuda Berg

No importa mucho lo que le dijeron pero sabemos que fue lo suficientemente importante para que Zidane olvidara por un momento que él podía elegir cómo reaccionar y en un instante de bronca perdiera el control y tirara por la borda toda su vida profesional.
Hay algo de todo esto en lo que me quiero enfocar porque considero que tendrá valor para tí.

¿Acaso esto no es algo que nos puede pasar a todos?
¿No todos tenemos botones que son disparados por otras personas?
¿Nos damos cuenta que no pueden hacerlo sin nuestro permiso?
¿Qué consecuencias tiene para nosotros darle el poder y la autoridad a personas que pueden usarlo en nuestra contra?
¿Cuál es el precio que pagamos cotidianamente por tener reacciones desmedidas en nuestra vida personal o laboral?

Si te resbalas, no significa que eres menos valioso.
Simplemente significa
que tenías algo que aprender del resbalón.

Hay personas o cosas que te harán reaccionar de una manera desmesurada y eso puede que sea en contra de tu propio beneficio.
Seguramente existirán situaciones que harán que tú mismo te expulses del camino de tus objetivos. Es como si hubiera personas que se especializaran en provocar  dichas situaciones para distraerte y desenfocarte pero está en vos no dejarte arrastrar por ellas.
Sólo tu puedes NO perder de vista tu objetivo final, aunque a veces esto suela resultar muy difícil en el mundo que vivimos. Yo considero que es un entrenamiento.

Nadie puede hacerte daño sin tu permiso.
Eleanor Roosevelt

¿Cuál es mi objetivo? Esta es la pregunta que me hago frente a cada situación que se me presenta.

¿Cuál es mi objetivo? Cuando escucho comentarios de los otros.
¿Cuál es mi objetivo? Si veo una distracción que se  presenta.

¿Cuál es mi objetivo? Cuando otro objetivo se interpone.
¿Cuál es mi objetivo? Antes de hacer o decir nada.

Busca no perder de vista tu objetivo y verás como al tenerlo presente se hará mas fácil concretarlo.

Cuando te inunde una enorme alegría,
no prometas nada a nadie.
Cuando te domine un gran enojo,
no contestes ninguna carta.

¿Qué es lo que te mas te enfurece?
¿Qué es lo que te hace reaccionar de una manera desmesurada?
¿Te has puesto a pensar de qué manera puedes ser el peor de tus obstáculo, frente a tus propias metas?

¿Identificas cuáles son las personas que tienen el poder de disparar tus botones?

¿Conoces cómo lo hacen?

¿Podrías anticiparte a ellos? ¿Haciendo qué?

Tienes opciones en esta vida
y la forma en que eliges puede afectar
la forma en que experimentas la vida.
Si elegís escuchar tu corazón
experimentarás sabiduría.
Si eliges escuchar a los demás
puede que experimentes sufrimiento.
Esa es tu elección.

Publicado en 2011.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

* Copy This Password *

* Type Or Paste Password Here *